1.- AMPLICACIÓN DE LOS TRAMOS E PESCA SIN MUERTE Y SUPRESIÓN DE REPOBLACIONES: A pesar de los cambios que paulatinamente se van produciendo, el modelo actual se sigue basando en gran medida en la muerte de más peces de los que el río es capaz de producir, y la consiguiente repoblación artificial con peces de granja, sin valor ecológico ni deportivo. Se ha demostrado ya que las repoblaciones perjudican a los ríos, de hecho, tras años de cisternazos, los ríos están cada vez peor. Suponen un riesgo de contaminación microbiana, introgresión genética, alteración de la diversidad biológica e impacto sobre las poblaciones autóctonas de invertebrados y peces.

Aunque todo esto está ya bien establecido y la ley de pesca sólo admite repoblaciones “cuando los estudios hidrobiológicos así lo recomienden”, se sigue repoblando masivamente y sin criterio ambiental numerosos tramos de ríos sorianos con truchas no autóctonas, lo que consideramos ilegal. Desde ASDEN hemos colaborado en varias ocasiones con las sociedades de pescadores sorianos y apoyaremos las iniciativas que se planteen encaminadas hacia el aumento de los tramos libres sin muerte y la disminución de los cupos de pesca. En un futuro próximo sólo se deberían poder extraer, de acuerdo con estudios técnicos, los excedentes que produce un río, consiguiendo su recuperación por medios naturales, ayudado, cuando las circunstancias así lo aconsejasen, con mejoras en el cauce y protección de los frezaderos y el alevinaje.

Por fortuna, las repoblaciones tenderán a desaparecer tal como se hacen ahora, intentando respetar los genotipos autóctonos y repoblando con inmaduros o truchas arcoiris (que no hibridan), de acuerdo con criterios técnicos. Aunque esto supone una mejora importante que debería adoptarse de inmediato como mal menor, no elimina todos los inconvenientes de las repoblaciones, que deberían reservarse para situaciones excepcionales muy justificadas.

2.- COTOS INTENSIVOS: Nos oponemos a la creación o mantenimiento de cotos intensivos en aguas públicas, debiendo reservarse para estanques privados o derivaciones de cauces convenientemente aisladas. Estos cotos suponen una trivialización del contacto con la naturaleza que debe ser la pesca, convirtiéndola en un artículo de consumo a tanto el kilo de carne. Además del riesgo de introducir agentes infecciosos, al sobrepasar la capacidad biológica potencial del río se está incidiendo negativamente sobre el resto de la vida acuática del río (que no se compone sólo de truchas; es más, la trucha sólo ocupa su sitio y necesita de los demás seres vivos). Mal están estos cotos en algún tramo con escasa capacidad truchera, pero donde ya ofenden es en sitios del valor natural de la Laguna Negra, transformada en una charca, desde el punto de vista de la ictiofauna.

3.- LUCIOPERCAS: El control de la lucioperca en una masa de agua como el embalse de la Cuerda del Pozo, es poco menos que imposible, pero dudamos de que las cañas puedan disminuir su población significativamente, desde la orilla. Una vez introducida, no existir soluciones claras para su erradicación. Queremos señalar que la autorización de su pesca y muerte posterior, sin límite durante todo el año, a pesar de la buena intención, está generando un “club de fans de la lucioperca”. Esto conlleva el peligro de que la lucioperca se siga extendiendo a otras aguas de similares características. Si se hubiera prohibido su pesca la primera vez que apareció en España, ahora no la tendríamos aquí. Mucho nos tememos que siempre habrá desaprensivos entre los aficionados al blackbass, siluro, lucio o percasol que intenten introducirlos, si luego se fomente su pesca.

4.- ANFIBIOS: Nuestra opinión es que la rana debería protegerse totalmente. No existe en Soria una tradición importante de pesca de este anfibio y el valor deportivo de dicha actividad es irrelevante. Tampoco existe una gran tradición gastronómica que, en cualquier caso, podría cubrirse con animales criados en cautividad. No conocemos estudios sobre poblaciones de ranas y su evolución en la provincia que pudieran demostrar un impacto nulo de su pesca. En el mundo los anfibios están en regresión por múltiples causas, hasta el punto de que se pueden considerar como indicadores de calidad ambiental. Por otras parte, ocupan un lugar importante en la base de la pirámide trófica, por lo que creemos que habría que dejar en paz, aunque sólo fuera una cuestión simbólica, a estos simpáticos batracios.

5.- PLOMO: Al igual que se está planteando en la caza, hay que empezar a pensar en sustituir el plomo, elemento altamente tóxico, por otros materiales alternativos menos contaminantes, sobre todo en aguas estancadas.

El mundo de la pesca es muy amplio y hemos expuesto aquí nuestra opinión sobre los aspectos más relevantes. Seguiremos insistiendo cuanto sea necesario, convencidos de que la pesca recreativa es un recurso que puede y debe ser utilizado racionalmente, contribuyendo incluso a exigir el cese de las agresiones a nuestros ríos y su recuperación cuando sea posible.

Extracto de la Propuesta de ASDEN en el Consejo de Provincial de Pesca, de septiembre de 1998

AL PRESIDENTE DEL CONSEJO DE PESCA. DELEGADO TERRITORIAL DE LA JUNTA DE CASTILLA Y LEÓN.