Nota de Prensa 26/01/2018

 

Una empresa de Ólvega investigada en una presunta red de tratamiento ilegal de residuos peligrosos.

 

 

            Hay un investigación judicial sobre una presunta red de tratamiento ilegal de residuos peligrosos vinculada a Chiloeches (Guadalajara) en la que presuntamente estaría involucrada una empresa soriana, que ha tenido varios incidentes ambientales.

 

            El Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil ha realizado una investigación de una presunta red de tratamiento ilegal de residuos peligrosos con la finalidad de eliminar irregularmente unas 3.000 toneladas en una planta de residuos de Chiloeches (Guadalajara), previamente al incendio que sufrió el verano de 2016.

            En esta red está implicada presuntamente una planta soriana que teóricamente recibía, descontaminaba y expedía tales residuos para eliminar su carga tóxica y así poder ser tratados en Chiloeches como residuos “limpios”, no peligrosos. Este presunto fraude se sustanciaba en un complejo papeleo para simular un falso transporte de los residuos entre empresas productoras de Madrid con otra de Soria que descontaminaba y finalmente otras de Guadalajara que eliminaban.

            Los presuntos delitos cometidos por las empresas investigadas serían delitos contra los recursos naturales y el medio ambiente, estafa y falsedad documental, cuya causa están ahora en el juzgado número 1 de Guadalajara.

 

 

            El nombre de la empresa soriana no viene citada en la información aparecida, pero en Soria sólo hay una empresa que tiene la capacidad de realizar el tratamiento y la “limpieza” legal de tales residuos, y además coincide con la nombrada en el artículo de la Revista Interviú “Incendio de Chiloeches: las pruebas del delito” del 12/09/2016, en la que explícitamente nombra a Distiller de Ólvega como presunta involucrada en la trazabilidad de los residuos tóxicos y peligrosos.

 

Esta empresa tiene una larga lista de referencias judiciales e incidentes ambientales:

 

1) La peligrosa actividad industrial de Distiller y su extraña ubicación alejada de los focos de producción de residuos peligrosos llevó a Ecologistas en Acción a presentar  una demanda judicial en vía contencioso administrativa en la se declaró nula la autorización ambiental concedida por la Junta de CyL en 2009 (sentencia de 6 de junio de 2014 del Tribunal Supremo, que confirmó otra sentencia anterior de 2011 del Tribunal Superior de Justicia de C y L), Su actividad fue posteriormente regularizada en 2014 mediante una nueva autorización de la Junta de CyL, en este caso de ampliación hasta el doble de su capacidad.

 

2) En de marzo de 2012 Distiller produjo un vertido tóxico al arroyo de los Caños, tributario de río y embalse de El Val (Cuenca del Ebro). Este vertido fue archivado por la CH. del Ebro y sancionado por la Junta de CyL la mínima multa posible, 5000€. El Alcalde Ólvega no tuvo constancia del vertido hasta 12 días después a pesar de haberse visto afectado el colector municipal; y el Jefe de Servicio de Medioambiente de Soria lo minimizó en declaraciones al periódico Heraldo de Soria como vertido formado por aguas del proceso de limpieza de vehículos.

 

3) También hay que nombrar los olores irritantes y malolientes que numerosos vecinos percibían y sufrían en el polígono industrial y viviendas aledañas, que presuntamente procedían de la zona de la fabrica de Distiller. Las numerosas llamadas de queja de los vecinos motivaron que la Junta de CyL realizara inspecciones en las que detectó sólo algunos problemas “inocuos” en la depuradora de aguas residuales de esta empresa que no tuvieron más trascendencia y que según la propia Junta de CyL se resolvieron.

 

4) Esta empresa también ha sido objeto de otros incidentes, como fueron dos incendios (10/12/2016 y 13/08/2017) dentro de la planta que derivaron en sendas actuaciones de los bomberos, los cuales se quejaron de la falta de información y de equipamiento para hacer frente a este tipo de incendios.