Cuadro 1:
La recogida de residuos sólidos urbanos en la capital se ha reducido un 14,50%, lo cual parece extraño. (A).
En la provincia se ha incrementado un 51,30%, lo cual significa que hay un avance fruto de la clausura de vertederos y transporte a la planta de Golmayo.
Si la población de los pueblos es casi los 2/3 de habitantes de la provincia, los residuos de esta deberían ser muy superiores a los obtenidos en la capital. Sin embargo podemos ver que son 2 millones de kilos menos. Esto quiere decir que hay mucho que hacer y que hay un número considerable de vertederos donde se depositan estos residuos que no entran en la planta.
(A) Lo mismo sucede con el matadero, con una reducción del 20,41% y los fangos con el 11,77%.
cuadro 2:
La recogida de papel y vidrio demuestra una evolución positiva con un ligero incremento del 1,19% y 3,04%. No obstante se ve que en los contenedores se ha incrementado en un 25,84% y un 15,97%, de donde se puede deducir una muy positiva concienciación ciudadana, frente a una reducción muy importante en la selección en planta, con un -10,41% y -17,74% de donde se podría deducir qué es importante la reducción de estos materiales que va al contenedor de R.S.U. No obstante falta mucho por hacer sobre todo en papel, donde es muy superior lo recogido en la planta con relación a lo obtenido en los contenedores. Todo ello a pesar de no haberse hecho durante 1999 ninguna campaña interesante de información a los usuarios.
El balance total es negativo al haberse reducido el reciclado en 1,38%.
cuadro 3:
En 1998 se recicló el 8,5%, con 2.151.710 kgr.
En 1999 se recicló el 7,9%, con 2.121.972 kgr.
Según el folleto de Urbasoria de 1995 cuando se hizo la planta, el reciclado previsto era del 13,6%, con lo cual, sobre datos de 1999, habría supuesto un reciclado de 3.850.262 kgr (13,6% /28.310.751 kgr tratados).
Se puede comprobar que lo reciclado en 1999 (7,49%) es casi la mitad de lo previsto por la misma empresa (13,6%).
Cuadro 5:
Papel y cartón: Mientras Córdoba recicla el 47,4% de este material y Montejurra el 40,7, Soria sólo lo hace con el 22,11% de la cantidad estimada de este material.
Vidrio: Córdoba recicla el 43,9% y Montejurra el 45,5%, mientras en Soria sólo se recupera un 19,07% de la cantidad estimada de este material.
Plástico: Córdoba recupera el 17,7% mientras que Soria lo hace tan solo con el 1,06%.
cuadro 6:
Su utilización inicial fue en 1997.
La vida del vertedero provincial está prevista para 20 años.
De recogerse todos los R.S.U. de la provincia, sin ningún reciclado el vertedero tendría una vida de 5,37 años con lo que habría de clausura se en el año 2001 (a).
En las mismas condiciones y con el porcentaje de reciclado que se está haciendo actualmente, la duración sería de 5,7 años y se clausuraría en el 2002 (b).
En las mismas condiciones y con el reciclado planteado por el Ministerio del Medio Ambiente para el año 2006, la duración del vertedero sería de 10,67 años y se clausuraría en el 2008 (c).
La colmatación del vertedero va mucho más despacio, no por una buena gestión, sino por estarse realizando una gestión pésima, dado que frente a las 108.000 Tm/año que se deberían de ingresar según el Ministerio mencionado, en 1999 se han ingresado 28.310 Tm de R.S.U. y 9.362 Tm procedentes del matadero, fangos, comercio, industria, polígono y sanitarios. (ver cuadro 1).
Cuadro 1: En función de la población, la recogida en la provincia debería de ser muy superior a lo recogido en la capital. Al no suceder así, significa que no se está recogiendo lo adecuado. No obstante en 1999 se aprecia un incremento importante.
Es extraño el descenso general experimentado en la capital.
Cuadro 2: Se aprecia un descenso en el reciclado total del 1,38%.
Se aprecia una reducción importante en la selección en la planta, lo que significa un descenso en el esfuerzo efectuado por la empresa.
Hay unos incrementos muy importantes en lo recogido en los contenedores, lo cual indica una muy buena respuesta por parte de los ciudadanos pese a no haberse hecho ninguna campaña importante de concienciación.
Cuadro 4: En 1998 se recicló el 8,5%. En 1999 el 7,49%. Ha bajado el coeficiente de reciclado.
En este último año está a casi la mitad de lo anunciado por la empresa en 1995 (13,6%), de donde se deduce que la gestión está siendo deplorable.
Cuadro 5: Esto se confirma al ver los reciclados efectuados en otras provincias.
Cuadro 6: Se ha prometido y ejecutado una planta de tratamiento de R.S.U. de toda la provincia, con un periodo de vida de 20 años.
En función de los residuos generados por cada habitante, según el Ministerio de Medio Ambiente, con la gestión actual, el vertedero se agotaría en poco más de cinco años.
Con los porcentajes previstos por este Ministerio para el año 2006, la vida del vertedero no sería muy superior a los 10 años.
El reducido volumen de residuos sólidos urbanos entrados en la planta significa una mala gestión del sistema de funcionamiento, así como el reducido porcentaje de reciclado.
Todo lo que se haga por incrementar estos, significará cumplir las promesas efectuadas (provincial), conseguir una mejora ambiental (reciclado) y una mejor gestión económica al prolongar la vida de la planta de reciclado y del vertedero, al aumentar el período de amortización.
Elementos fundamentales para conseguir estos fines serían, además de los ya indicados, el incrementar la plantilla de "manipuladores" de la planta, que 1999 a sido de unos 4,6 operarios/mes y evitar el alto porcentaje de camiones que van directamente al vertedero sin pasar por la planta de selección.
Compostaje: No se nos han facilitado datos pero por lo que hemos podido apreciar el volumen destinado a este fin es muy reducido. Además consideramos que el sistema elegido, quizás no sea el más adecuado, ya que al ser aerobio, obliga a permanentes volteos lo cual genera malos olores de manera constante.
De haberse elegido un sistema anaerobio, se evitaría este volteo y por consiguiente no se apreciaría ningún mal olor.
Contorno: Es deplorable ver todo el entorno exterior del recinto de la planta siempre lleno de papeles y plásticos que el viento arrastra por no haber tenido un tratamiento adecuado así como el que no se hagan recogidas periódicas para suprimir estos residuos.